Star Trek Into Darkness (Star Trek: En la oscuridad) (2013)

Star Trek Into Darkness (2013)
Star Trek Into Darkness (Star Trek: En la oscuridad) (2013). Fuente: IMDb

Tras un atentado en unas instalaciones de la Flota Estelar, envían al capitán Kirk y el resto de la tripulación del Enterprise a perseguir al culpable a zona enemiga. En el proceso descubrirán que no todo es lo que parece.

Ya dije hace unos días que en breve vería Star Trek Into Darkness y que las críticas que había leído eran buenas. Esto hizo que fuera con las expectativas altas y ya se sabe lo fácil que es quedar decepcionado en estos casos. Pero nada de eso, en esta ocasión las expectativas estaban sobradamente justificadas.

La película tiene un ritmo trepidante y no se hace aburrida en ningún momento. En el apartado interpretativo no tengo ninguna queja, Chris Pine sigue haciéndolo muy bien, pero el que más destaca en este sentido es Benedict Cumberbatch, conocido por protagonizar la serie británica Sherlock, también muy recomendable. Hasta Zachary Quinto parece que mejora con respecto a la primera parte y su Spock me cae mejor en esta, aunque sigo sin poder evitar ver a Sylar (Heroes), es mi cruz personal.

No me esperaba para nada que Leonard Nimoy repitiera su papel de Spock Prime y aunque solo ha estado unos pocos minutos en pantalla, su presencia se agradece. También repite Bruce Greenwood como Pike.

El personaje de Cumberbatch me ha parecido muy interesante y ha conseguido que tenga ganas de ver algunas de las películas antiguas. ¿Quién sabe?, quizá caiga alguna próximamente. Son varias las referencias a episodios de Star Trek TOS y a las películas posteriores. Y si yo he pillado algunas de esas referencias sin haber visto la serie ni algunas de las películas, no me quiero ni imaginar las que podría ver alguien con más bagaje trekkie.

Aunque le he puesto la misma nota que a Star Trek (2009), yo diría que esta secuela me ha gustado incluso más, me ha parecido más redonda y con menos fallos que la anterior. Pero darle más nota a esta supondría ponerle un 5 de 5 y, aunque me he sentido tentado, me resisto a dar una nota perfecta tan fácilmente.