Brisas del Mediterráneo 2013 - Día 2: navegación

Esta entrada forma parte de una serie dedicada al crucero por el Mediterráneo del que disfrutamos en julio de 2013. Las entradas están recopiladas en Brisas del Mediterráneo 2013.

El domingo 21 fue el primer día completo de crucero y lo pasamos navegando, sin escala en ningún puerto. Al menos nos sirvió para conocer mejor el barco y descansar un poco del ajetreo del día anterior. En otras fechas el día de navegación se hace al final, que quizá sea más conveniente.

Nos levantamos a las 9.30 tras una buena noche de descanso y lo primero que notamos fue el movimiento del barco, bastante más acusado que el día anterior, aunque yo al principio creí que eran cosas mías, que aún estaba medio dormido. Mariluz tuvo que tomarse una Biodramina para evitar que el mareo fuera a más.

Se nos hizo un poco tarde para el desayuno, cuyo horario en el buffet Panorama era hasta las 10.30. Salimos del camarote pasadas las 10 y nos dimos cuenta de que nos habían dejado en la puerta un papel: por alguna razón no habían aceptado la tarjeta de crédito de Mariluz. Fuimos a solucionarlo a recepción, donde había una buena cola —no éramos los únicos con ese problema—, pero tras un rato allí nos dimos cuenta de que nos íbamos a quedar sin desayuno y salimos pitando hacia el buffet. Yo me acabé comiendo un sándwich de jamón cocido y queso, un té Earl Grey y un yogur; habían empezado a recoger ya las cosas y no dio tiempo de más, aunque luego nos dimos cuenta de que en la parte más cercana a la entrada no habían sido tan estrictos. Pero bueno, ya habría tiempo de atiborrarse.

Tras el desayuno exprés volvimos a la cola de recepción y dejamos mi tarjeta a ver si esa no daba problemas. Al día siguiente lo sabríamos según si nos dejaban o no un nuevo papel en la puerta. Con la mía ya no hubo ninguna pega, a saber por qué con la de ella sí. Justo al lado de recepción había una exposición gastronómica con comidas bellamente presentadas, esculturas de azúcar y sandias talladas. Hicimos algunas fotos y luego ayudamos a desmantelarlo comiendo. Eran dulces y yo soy más de salado, así que me lo podría haber ahorrado, la verdad.

Parte de la exposición gastronómica en el Sovereign
Parte de la exposición gastronómica en el Sovereign: dulces y una de las esculturas de azúcar

Estuvimos un rato paseando por el barco haciendo fotos y nos fuimos a descansar un rato al camarote, donde aproveché para probar la ducha.

A la hora del almuerzo decidimos probar The Grill, el restaurante de la cubierta 12 con vistas a las piscinas que por el nombre yo creía que tendría variedad de carnes a la parrilla. Nada de eso, ese día había salchichas, escalope de pollo, pizza… no nos convenció, así que acabamos comiendo una vez más en el buffet Panorama en compañía de algunos del grupo de Facebook con los que nos encontramos y con los que también pasamos la sobremesa en el café de San Marco, donde estuvimos hasta más de las 18.00.

Tras la agradable sobremesa fuimos al camarote a prepararnos, que ese día tocaba cocktail especial, fotos con el capitán y presentación de oficiales y jefes de departamento. Todo ello empezaba a las 19.00 para los de nuestro turno. Pasaron 45 minutos hasta que toda la gente consiguió entrar al teatro tras hacerse la foto de marras. Por fin empezó la presentación, en la que nos dijeron que en el Sovereign había trabajadores de 60 nacionalidades distintas, una pasada. Y luego un espectáculo muy divertido a cargo de Celsius y Petaka, un dúo muy bueno de artistas visuales que lo mismo hacían humor, que malabares o equilibrismo. De lejos lo que más me gustó del cocktail. Durante todo el espectáculo pasaban camareros con bandejas de canapés de vez en cuando.

Luego llegó la cena de gala, en la que no estuvo presente el capitán, o yo al menos no lo vi. Con eso de que era de gala, el vestuario recomendado era formal y la gente en general iba más arreglada. Hasta el menú tuvo una presentación distinta, enrollado y con un lazo. Mi cena consistió en:

  • Paté de pato en hojaldre con salsa de vino oporto
  • Solomillo de buey a la mediterránea
  • Surtido de quesos internacionales

Y la de Mariluz en:

  • Paté de pato en hojaldre con salsa de vino oporto
  • Roulade de pavo relleno con tomate seco
  • Dueto (un brownie si no recuerdo mal)

Hasta los nombres de los platos se vistieron de largo.

Tras la cena, un rato de relax en el 360 con algunos de nuestros acompañantes habituales y a la 1 a dormir, que al día siguiente tocaba ir a Túnez y el desembarco estaba previsto para las 7.00 hora del barco, que es la de España (en Túnez sería una hora menos).

Aprovecho para decir que estoy subiendo a Flickr algunas de las fotos que hice durante el crucero, por si queréis echar un vistazo. En el momento de escribir esto solo tengo pendientes de subir las de los dos últimos días, cosa que pienso hacer en breve. De todas formas, en futuras entradas enlazaré el album del día que corresponda.

Más sobre el día 2

Gastos del día: 0 €

Información de actividad (vía Fitbit One de Mariluz):

  • 5331 pasos
  • 1685 calorías
  • 3.52 km
  • 11 plantas subidas

No está mal la actividad para no haber salido del barco, ¿no? Ya dije que era grande.